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22 de junio de 2021Ofimática, a veces también llamado burótica, designa al conjunto de técnicas, aplicaciones y herramientas informáticas que se utilizan en funciones de oficina para optimizar, automatizar, mejorar tareas y procedimientos relacionados.
La Ofimática es la combinación de Hardware y Software para elaborar, automatizar y registrar de forma digital la información que necesita una oficina para llevar a cabo los procesos y metodología de manera correcta.
Tuvieron mucho que ver en su origen la introducción de los procesadores de textos, que fueron sustituyendo a las máquinas de escribir en las oficinas.
Charles Simonyi fue el creador de la ofimática en 1948 a través de la puesta en marcha de Microsoft Office, con la colaboración de Richard Brodie.
Sin duda, este concepto siempre está referido y relacionado con el trabajo de oficina y las herramientas que se utilizan para llevarlo a cabo.
Fue un cambio muy innovador. En este sentido, dicho proceso sirvió para agilizar los trabajos de oficina, y además se fueron creando nuevas opciones para llevarlo a cabo. Las actividades manuales que eran las principales en aquella época, se fueron sustituyendo y algunas automatizando.
Las gestiones administrativas, la planificación de reuniones, la introducción de Internet, el uso de ordenadores y los diferentes procesadores y componentes de oficina fueron tomando protagonismo para agilizar todas las tareas.
No es desacertado decir que la ofimática fue la disciplina por la que la computación (informática) conquistó a las masas, ya que permite a cualquier persona de cualquier perfil hacer tareas productivas, ya sea en el trabajo o en casa.
Buena prueba de esta importancia de la ofimática es que este tipo de aplicaciones ha llegado a todos los rincones de los dispositivos electrónicos: desde los sistemas operativos de escritorio hasta la nube mediante el navegador, pasando por nuestros teléfonos.
Cualquier paquete de ofimática debe tener, por lo menos, las tres aplicaciones centrales que conforman el procesador de textos, la hoja de cálculo, y las presentaciones. Lo que vendría después es la base de datos, una aplicación más difícil de dominar y a la que no todos los usuarios sacarán partido, por lo que muchas veces es un programa opcional.
Lo que sí deben encontrar sus usuarios es una integración entre las distintas aplicaciones, y altas posibilidades de integración de los contenidos generados.