CURSOS ONLINE ¿REALMENTE ENSEÑAN?
30 de noviembre de 2021LAS PROFESIONES DE ESTA NUEVA ERA
10 de diciembre de 2021Hace unos años la educación a distancia era el patito feo de la enseñanza al estar menos reconocida que la educación presencial. Hoy, el aprendizaje ONLINE se ha convertido en la opción preferida de millones de personas por su flexibilidad, por eliminar las barreras geográficas y por dar acceso a una oferta educativa más variada.
Convertir un curso presencial a online, implica mucho más que sencillamente poner el curso en una plataforma de aprendizaje o usar un sistema de videoconferencia, para “impartir clase”. Implica, por tanto, una mirada sistemática para integrar adecuadamente una serie de herramientas, plataformas y tecnología que resulte por un lado atractiva, interactiva, estimulante y que propicie la colaboración, pero sobre todo que los estudiantes logren los mismos resultados de aprendizaje que en un curso presencial.
En la formación presencial el centro está en el profesor y en su capacidad para transmitir su conocimiento. La formación online pone en el centro al alumno y su capacidad para aprender a partir de la práctica, por eso damos la vuelta a la clase y lo más importante es aprender a través de la experiencia con prácticas.
La diferencia más importante entre la educación presencial y la virtual reside en el cambio de medio y en el potencial educativo que se deriva de la optimización del uso de cada medio de comunicación.
Con la llegada de nuevas tecnologías y una mayor cobertura de internet, la educación está cambiando, (cursos en línea masivos y abiertos) y programas profesionales que ofrecen un mayor alcance ante la educación presencial.
Uno de los aspecto más favorable de la educación virtual, pues su naturaleza no obliga a los estudiantes a desplazarse a un establecimiento ni a tomar clases en bloques de horas, sino que se acomoda a sus necesidades y espacios.
La virtualidad supone un alto compromiso individual y capacidad de organización. Por eso la motivación puede ser una barrera al momento de completar estudios.
La formación online y la presencial son dos formas distintas de adquirir conocimientos. Aunque las dos persiguen la calidad de la enseñanza, cada una utiliza su propio método y establece sus propios canales y pautas de aprendizaje.
La educación virtual recurre a Internet y a las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) para facilitar a los alumnos herramientas didácticas como:
- Chats.
- Blogs.
- Videoconferencias.
- Documentos compartidos que dinamicen el curso y lo hagan más intuitivo y fácil de seguir.
Este sistema permite a los estudiantes trabajar, comunicarse, examinarse y acceder a los contenidos desde cualquier lugar.
La formación a distancia se caracteriza también por fomentar la autonomía y la curiosidad de los alumnos, el trabajo colaborativo, el pensamiento crítico y el aprendizaje autodidacta. Este sistema, además, diversifica las fuentes de conocimiento.
En cambio, en la educación presencial los estudiantes acuden a un aula física donde transcurre la enseñanza y gran parte del aprendizaje. En esta modalidad los alumnos adquieren un papel más pasivo y se adaptan al ritmo y al método del profesor, que se convierte en la principal fuente de consulta.